domingo, 26 de octubre de 2008

Varias exposiciones y algo más de comida.


Esta semana ha sido muy entretenida, vamos por decirlo de algún modo. Como viene siendo habitual en Hamburgo cada semana se celebran mínimo dos inauguraciones de las exposiciones que realizan la gente de la escuela. Por supuesto hay de todo, una más elaboradas, otras tan sólo se busca pasar un buen rato intentando montar una fiesta, continuan otras que son absolutamente absurdas tanto la expo como la fiesta, y siempre hay alguna que por lo menos está muy bien, aunque sea para charlar con alguien y beber algunas birras.

Antes de esto, el jueves presenté mis trabajos al tutor que tengo en la escuela. Se llama Norbert Schwontkowski, podéis encontrar cosas suyas en la red, y también ante el resto de la clase. La verdad, es que tanto el trabajo de Ignacio como el mío tubieron buena acogida. Ambas son tan diferentes al tipo de trabajo que se suele realizar por aquí que parece que gustaron. Los demás y el profesor nos preguntaban cosas, sobre el proceso de trabajo y también sobre España. Al acabar la clase un chaval chino que está en nuestro grupo, vino a presetarse a nosotros, y nos comentó a ambos que le gustaba el trabajo que habiamos realizado cada uno de nosostros.

El viernes acudimos a una exposición que se realizaba en el barrio de Altona. Era otra exhibición llevada a cabo por alumnos de la HfBK, y otra gente joven de la ciudad, además, una compañera francesa que viene con nosotros al curso de idioma estaba por allí participando, y tampoco teníamos nada que hacer. Llegamos allí y el espacio se presentaba bastante espacioso, pero con montones de cosas absurdas en él, o mejor dicho, algo realizado de forma forzada e independiente unas cosas de otras. estubimos por allí bebiéndonos unas cerves y charlando con Blondine (nuestra amiga francesa), la cual nos explicó su obra. Desde mi punto de vista no me gustaba nada. Parecía improvisada y escasquetada en mitad de aquella sala y el efecto que pretendía tampoco estaba muy logrado, que era ni más ni menos que lograr sombras mediante plantas y focos tras un telón blanco.

La foto que veis pertenece al sábado. En ella aparecen Ignacio y Carles, este último es un chaval de Mallorca también de erasmus en la misma escuela que yo, aunque el proviene de la facultad de bellas artes de Barcelona. Los tres juntos fuimos a por un montón de verdura, frutas, repostería y hasta bombones, que en mi caso va a durar más de una semana en mi casa. Eh, y todo esto de gratis.En fin sabemos ingeniarnoslas.

sábado, 18 de octubre de 2008

Bienvenida a los estudiantes extranjeros


Como estudiantes erasmus que somos, nos merecemos una bienvenida, o las que hagan falta, ¿por qué no? Así que, se hizo este pasado miércoles una pequeña fiesta, que comenzaba a las 8 de la tarde es la cafetería de la escuela. Los primeros 90 litros de cerveza eran gratis, así que por lo menos yo lo apreveché. Me tomé 6 birras sin pagar un duro, aunque no se que tipo de cerve era, ya que no subía nada.

Tampoco fue mucha gente, supongo que porque aparte de ser miércoles, también se presento una vez más la lluvia de Hamburgo. Por estas circunstancias, la fiesta adquirió un carácter íntimo y agradable para pasar una buena noche.

La okupación



Bueno, estos días han sido muy variopintos pero buenos en general. Hemos estado intentado encontrar un espacio para trabajar en la escuela, entre otras cosas.

El obtener un hueco para trabajar es algo difícil, puesto que casi todas las aulas están ya ocupadas. Fuimos a preguntar a la clase de "nuestro" profesor. Allí había dos chavales, al cual uno ya conocíamos de cuando nos presentamos en clase ante el resto del grupo, este chico nos comentó que esa aula estaba completa, pero que en la del piso superior había todavía hueco. Así que, fuimos hacia allí, entramos y tan sólo había una chica pintando en el suelo ella sola, rodeada por un motón de paredes con cosas bastante cutres. Sin preguntarle nada, nos decía que ella pintaba allí siempre. Parecía que estaba de la hoya, bueno, seguramente lo estaría. En fin, nos largamos de allí, pero justo en el pasillo nada más salir de esa clase, advertimos que había un espacio que podría considerarse bueno para trabajar. No lo pensamos dos veces, sin comentar nada a nadie, ocupamos esos metros situados en el corredor. Y que se enteren. De aquí no nos hecha nadie, es más, si quieren que nos vayamos que nos den un lugar para trabajar, y tal vez ocupemos los dos, porque ya puestos, tampoco es plan de abandonar ese magnífico pasillo. Las cosas son así.

domingo, 12 de octubre de 2008

Otra semana más


Esta ha sido una típica semana hamburguesa, es decir, ir a la escuela continuamente a por el "semester ticket", que es el ticket que tenemos aquí los estudientes para subir gratis al transporte público, y finiquitar de una vez la matrícula con las materias que cursaré en la escuela. Finalmente, estas cuestiones quedaron resueltas el pasado jueves, y fuimos afortunados, ya que esa misma tarde en la estación central a Ignacio y a mi nos exigieron el billete los revisores. Teníamos el ticket, así que sin problemas. Nos ahorramos 40€ de multa cada uno. Ja,ja no está mal.

También, tuvimos nuestra primera clase, en las cuales las diferencia respecto al sistema educativo de España es abismal. El profesor, llamado Norbert Schwontkowski, parecía el típico abuelillo, si, de esos que van a viajes del inserso y esas cosas, aunque era majo y el ambiente de la clase era muy bueno. Allí, nos presentamos al resto de los alumnos, tras esto cada uno mostró el trabajo que había realizado durante el verano. Ahora viene lo bueno, una alumna que había estado de viaje por rumanía con su autocaravana contó historias sobre su viaje. A continuación, bajamos todos a ver la caravana, en la cual yo esperaba algo interesante, y en la cual tan sólo había una cocinilla bastante gastada y cosas por el estilo. Después, todos nos hicimos "fotos de familia" junto a la caravana.

El viernes había una "fiesta erasmus" en la residencia donde vive Titania, una amiga belga del curso de idiomas. Fuimos para allá. La entrada que tuvimos que hacer ya fue de chiste, hicimos como si estubieramos mirando los buzones por casualidad, y en cuando entró uno nos colamos detrás. Pero aquí no acabaron las complicaciones para encontrar la fiesta. Como desconociamos la habitación, y debido a que habían más de las que se puede uno imaginar, continuamos la búsqueda por el bar, en el cual el ambiente era bastante cutre. Tras esto volvimos a la puerta y nos encontramos con un chaval portugués, que asiste también a la escuela de arte, diciéndonos que la fiesta era en el bar. Resumiendo, al final llamamos por teléfono y bajaron a recogernos a la puerta.

Una vez allí, la situación era extraña. Como decirlo, era una fiesta descafeinada, es decir, de esas fiestas que una vez cuelan pero dos....lo dudo mucho. Eso si, hicieron un buen pastel de chocolate y plátano, además de la "Holsten", que siempre está buena. Esa noche la terminamos en St. Pauli, en un pub llamado "Cobra", acojona el nombre, eh. Ya una vez que se fundieron los plomos fuimos todos a partir la cama.

Pd. Como se me ha olvidado la cámara de fotos estos días, me he permitido buscar por la red algo que pudiera servir como imagen. Bueno, no es que sea igual pero se acerca bastante, ja, ja

Chao


Sábado:
Daniel, nos comentó de una fiesta que se produciría esa noche, así que, para allá fuimos. Ya en la estación de tren nos encontramos con Alexa, una chica de Madrid que también estudia en la HfBK.

Ya una vez en el edificio, que tenía aspecto de casa okupa, pero al parecer es bastante caro vivir en ese lugar, la fiesta era muy diferente a la del día anterior. Parecía que estubiera en una disco, y no sólo eso, también aparecieron más españoles, incluso hasta un chaval de Benidorm que me dijo que por Elche había estado patinando en la plaza de la virgen, bueno no hablé mucho más con él. La última vez que lo vi en la fiesta, estaba durmiendo en un sillón que había en mitad de la gente.

Bueno, me voy despidiendo ya porque el resto os lo podeis imaginar, cuando estubimos lo bastante rebentados como para no tener ganas de continuar con la noche, cada uno de nosotros se fue al sobre.

domingo, 5 de octubre de 2008

Llegó Felix



El sábado fue un día que no voy a olvidar. Vino Felix a visitarnos a Hamburgo. Bueno, para los que no lo conozcáis, Felix en un chaval de Hildesheim, un pueblo a dos horas al sur de Hamburgo, y lo conocimos hace dos años, cuando estubo de erasmus en Madrid. Un chaval muy majo y bastante buena gente, todos los años allá por el mes de febrero a venido a Madrid para visitarnos. El año pasado tardó treinta horas en coche. Que humor, ja,ja. Por eso es uno de los grandes.

Se recibió a Felix con mucha alegría, además hace poco que había vuelto de Chiapas (Mexico), dónde ha estado de voluntario. Cenamos un kebap, y tras esto nos fuimos a dar una vuelta, sin saber exactamente hacia dónde nos dirigiamos. Finalmente, como por inercia, llegamos al lago que hay en el centro de la ciudad, y continuamos bebiendo cada uno nuestra cerveza. Era como dar un paseo, pero era en mitad de la noche y con más frío.

Ahora viene la cosa más inexplicable.

Ya con bastante camino hecho alrededor del lago, como es natuaral las cervezas empiezan a bajar, y eso no aguanta indefinidamente. Bueno, vamos todos entre unos arbustos oscuros para mear. Termino mi trabajillo, y conforme me doy la vuelta y los demás intentaban posicionarse en cualquier lugar, aparecieron de repente como 10 o 12 polcias, unos uniformados y otros de incógnito, y nos rodearon. Yo pensé que nos multaban por mear en la calle, vamos es lo más lógico. Pensé. "Nos han pillao. Ya nos llevamos la receta". Nada de eso, nos pararon y nos pidieron la documentación a todos. Las mochilas que llebaban Carstern y Felix fueron registradas, verificaron nustros datos en un coche patrulla que vino. La agente, seguía tomando notas de nustros documentos, y descripción físsica de nuestra cara, aunque de noche que era tampoco vería muy bien, mientras los demás policias continuaban con el circulo y nos alumbraban con linternas por si haciamos algún movimento raro o algo de eso. Así estubimos como 15 o 20 min., todos en pié, quietos y callados, mientras esos continuaban con su "trabajo". Al final, nos dejaron ir y a Felix, la policia que recabó nuestros datos, le dio una trajeta oficial de la policia, con su nombre y teléfono.

Sinceramente, no se que buscaban, a quién buscaban, si es que buscaban a alguien, que querían de nosotros y porqué nos pararon, entre demás cosas que no entendía.

Tras esto, nos volvimos a casa, también nos motivó a ello el comienzo del típico chubasco hamburgués.

Ya domingo por la mañana, Ignacio, felix y yo, nos hemos ido a dar una vuelta en bici bajo la lluvia y el viento a Hafen, es decir, al puerto. Vamos, un día totalmente de verano hacía. Ya una vez que nos hemos calado como pollos, hemos vuelto a casa y he preparado una tortilla de patatas. Debo reconocer que esta vez con una presentación tan buena como la anterior, parecía más la típica tortilla de estudiante. Pero no todo es malo, de sabor estaba bien, y encima había gula. Ya a media tarde Felix se ha vuelto para Hildesheim, para continuar con su día a día.

Felix, nos veremos un poco más adelante.
Hau Weg die Scheisser!!!

Jueves: terminamos el curso. Viernes: un concierto


Este jueves pasado terminamos el curso intensivo de alemán. Bueno, aprender, algo he aprendido, pero sobre todo lo bueno ha sido conocer a la demás gente de erasmus. Ha sido divertido, aunque por momento me aburría, aunque mucho menos de lo pude imaginar en principio. En un par de semanas comenzaremos las clases de nuevo, pero esta vez ya no serán intensivas, sino clases normales, por supuesto siguen siendo gratis.

Tras dar por finalizado la el curso con un brindis de vino, fuimos a casa de Ignacio a tomar una cerveza, para posteriormente dirigirnos a una inauguración en una galería de arte. El espacio era genial para albergar exhibiciones. Por supuesto, debido a la apertura había bastante gente, aunque lo que fue la exposición exceptuando unos dibujos que me parecían que estaban muy bien, eran cosas bastante normales, y el algunos casos las obras llegaban a ser de baja calidad. Eso si, los precios por las nubes. Y encima el camarero me invitó a dos cervezas, porque en esta galería las invitaciones se pagaban, todo lo contrario que en España, donde además de la invitación te obsequian con canapés. En finalizar esto, cada uno nos dirigimos a nuestra casa, que la fiesta está muy bien, pero también hay que ahorrar dinero.

Al día siguiente, viernes ya por la noche fuimos, esta vez sólo Ignacio y yo, a un concierto gratuito de saxo y clarinete, eso ponía en internet. Llegamos al lugar en cuestión como media hora tarde, era un bar bastante íntimo, me recordaba a algunos garitos de Lavapiés, pero el concierto no había comenzado, es más, érasmos los primeros en llegar. Bueno, nos pedímos una "Astra" cada uno, que es la cerveza cutre de Hamburgo, y al cabo de unos minutos empezó el show, el experimento, o mejor dicho, lo que coño fuera eso. Había un tío sólo, primero tocó el clarinete y después el saxo, pero no tocaba como podéis imaginar dichos instrumentos. Primero se ponía como a soplar de forma desganada, continuaba como de forma loca, después le daba golpes al saxo,...y demás locuras. Se me hizo eterno el concierto. Esa música fue hasta insoportable. Madre mía cuanto colgao hay por el mundo.

Aguantamo por una sencilla razón, fuimos en total, seis personas al concierto, y si te ibas se notaba de la ostia, y así nos daba también tiempo a acabarnos la birra.